Cómo sobrevivir al invierno en Estonia: Consejos para los meses fríos

Los inviernos en Estonia son fríos, largos y oscuros. Durante los meses de noviembre a marzo, las temperaturas pueden descender por debajo de los -10°C e incluso llegar a -20°C en algunas zonas. Pero no te preocupes, ¡con algunos consejos prácticos podrás disfrutar del invierno estonio y sobrevivir a las temperaturas extremas!

1. Viste por capas: la clave para no pasar frío

La vestimenta es esencial en Estonia durante el invierno. Asegúrate de llevar varias capas de ropa: una base térmica, una capa intermedia de aislamiento (como una chaqueta de lana o forro polar) y una capa exterior que sea impermeable y resistente al viento. Además, no olvides unos guantes, bufanda y un buen gorro para proteger tus extremidades.

2. Calzado adecuado

El calzado es crucial, ya que las aceras pueden estar resbaladizas por la nieve y el hielo. Invierte en unas botas impermeables con buen aislamiento y suelas antideslizantes. Esto te ayudará a caminar con seguridad y mantener los pies calientes.

3. Asegúrate de tener calefacción

La calefacción en los edificios en Estonia suele ser centralizada, pero si vives en una casa independiente o compartida, asegúrate de que todo esté funcionando correctamente. Tener un buen sistema de calefacción es fundamental para mantener el calor dentro de tu hogar.

4. Disfruta de la sauna

Los estonios no solo usan la sauna por salud, sino también como un ritual social y de relajación. Si tienes acceso a una sauna, ¡aprovéchala! Ayuda a descongestionar las vías respiratorias, relajar el cuerpo y entrar en calor.

5. Aprovecha el sol (cuando salga)

Durante el invierno, Estonia tiene días muy cortos, con pocas horas de luz. Aprovecha esos momentos cuando el sol aparece para salir a caminar o disfrutar de actividades al aire libre. También es recomendable tomar suplementos de vitamina D si notas falta de energía.

6. Actividades al aire libre: ¡no te quedes en casa!

Aunque hace frío, hay muchas actividades al aire libre para disfrutar del invierno en Estonia. El esquí de fondo, patinaje sobre hielo y paseos por los bosques cubiertos de nieve son solo algunas de las opciones. Estar activo te ayudará a mantenerte caliente y disfrutar de la temporada.

Conclusión, para los meses fríos:

Aunque el invierno en Estonia puede ser duro, con la ropa adecuada y un poco de planificación, ¡puedes disfrutarlo al máximo! La clave está en estar preparado y aprovechar al máximo las actividades que la temporada ofrece. Además, las saunas, los días soleados y el buen calor en casa son esenciales para mantener el ánimo alto durante los meses más fríos.